Así es cómo los emprendedores pueden proteger su salud mental mientras son sus propios jefes Aquí te compartimos algunas formas en que los emprendedores pueden proteger su salud mental durante el estresante pero gratificante viaje de crear y construir su propio negocio.

Se tiende a pensar en el espíritu emprendedor como una forma de vida deslumbrante. Mucho de eso se le puede atribuir a lo que se publica y se muestra en las redes sociales de los emprendedores más exitosos que muestran su "libertad" y exclusivo estilo de vida.

Lo que la gente no entiende es que ese tipo de vida solo lo tiene una minoría de emprendedores, y casi todos ellos no consiguieron ese éxito sin años de lucha y dificultades financieras mientras construían su empresa.

Además, lo que se muestra en las redes sociales tampoco suele ser una descripción real del estilo de vida de una persona.

Ser emprendedor no se trata de despertar en una isla remota y enviar algunos correos electrónicos antes de subirte a un jet privado a Italia. Atender tu negocio es una rutina diaria, incluso para aquellos que han conseguido transformar a su empresa en una máquina generadora de ingresos.

No es fácil decidir iniciar y construir un negocio, como lo refleja un estudio que muestra que el 72% de los emprendedores informaron sobre problemas de salud mental. El estudio también señaló que los emprendedores eran significativamente más propensos a tener antecedentes de depresión, trastorno por déficit de atención con hiperactividad, uso de sustancias y diagnóstico de bipolaridad.

Una pequeña empresa recién formada no puede crecer o ganar dinero en las primeras etapas si su líder no tiene la mentalidad de "prisa" para trabajar día tras día.

Aquí hay algunas formas en que los emprendedores pueden proteger su salud mental durante el estresante pero gratificante viaje de crear y construir su propio negocio.

1. Cuida tus finanzas

Como en cualquier área de la vida, los problemas financieros son la principal causa de estrés y ansiedad entre los emprendedores. Algunas personas ponen los ahorros de toda su vida en juego sin tener de dónde más echar mano.

Según smallbizgenius.net, el 39% de los dueños de pequeñas empresas utilizan efectivo para financiarlas. Aunque ese es un método que ha funcionado para algunos, no es recomendable y podría dejar a alguien en una situación difícil si el negocio no funciona.

El viaje inicial es lo suficientemente estresante para empezar, y no es inteligente ponerlo todo en una canasta que falla el 90% de las veces. Es importante asegurarte de que haya un colchón financiero con el que vivir durante al menos tres a seis meses.

Si eso no es posible, considera un trabajo de medio tiempo que te permita horarios flexibles. Otra opción es tener una actividad secundaria que genere ingresos, como una empresa de alquiler o curar una cartera de inversiones.

Lo más importante es intentar dejar la mayor cantidad de dinero sobre la mesa para cuidar el lado personal de las cosas y encontrar una manera de generar un flujo de ingresos adicional al mismo tiempo.

2. No tengas miedo de delegar

Otra forma rápida de sobrecalentarse y enfrentarse a un nivel de estrés aún mayor es intentar hacerlo todo por tu cuenta. Incluso si la startup todavía no está en condiciones de contratar empleados de tiempo completo, existen un sinfín de recursos disponibles para ayudar a una empresa a subcontratar para resolver ciertas tareas.

Esto es importante porque el agotamiento puede ocurrir muy rápidamente cuando se está formando una empresa, y ese proceso tiende a acelerarse si el fundador está tratando de hacerlo todo.

Otra opción para evitar el desgaste es iniciar un negocio con un socio. Por lo general, cada persona sería un experto en un área determinada de la empresa, lo que no solo te quitaría algunas cosas de encima, sino que también resultaría benéfico para impulsar al negocio.

3. Rodéate de las personas adecuadas

Al comenzar el viaje como emprendedor, es importante para el bienestar mental de una persona estar rodeada de influencias positivas.

Habrá algunos amigos y familiares que cuestionarán tu decisión de dejar la vida empresarial con un sueldo fijo. Recuerda, esos comentarios provienen de una posición de cariño y amor, pero no son emprendedores.

Rodéate de mentores que hayan tenido éxito como emprendedores. Pídeles consejo y orientación durante el comienzo del viaje y continúa desarrollando esa relación y expandiendo una red profesional de contactos a medida que creces el negocio.

La salud mental puede deteriorarse fácilmente si las personas equivocadas dan el consejo equivocado o si te empujan hasta el punto del agotamiento. Seguir los consejos anteriores y controlar tus emociones te ayudará a garantizar que el cuidado personal siga siendo una prioridad absoluta.